¿Aún no conoces los beneficios del masaje deportivo? En el blog de hoy descubriremos algunos de ellos y el porqué es un método tan eficaz en deportistas.
Los masajes deportivos, en contraste a los métodos de masaje más usuales conocidos por sus propiedades calmantes y sedantes, son masajes preventivos, relajantes y terapéuticos. Son realmente útiles para asistir a los atletas a progresar en su rendimiento.
Perteneciente a la enorme familia de la terapia de masaje, una de las terapias más ancestrales contra el dolor físico, este masaje es una terapia con un enfoque destinado y desarrollado primordialmente para atletas de alto nivel. Asimismo, puede ser interesante para personas con actividad física regular.
Independientemente de cuando se realice, ofrece una extensa pluralidad de beneficios, además de un confort físico muy satisfactorio a los pacientes.
En realidad, lo que ocurre con este tipo de masaje, es que las distintas maniobras empleadas facilitan el calentamiento de la temperatura anatómica y movilizan las articulaciones al quitar los calambres, la fatiga y los dolores.
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Antes del ejercicio
Los masajes deportivos ayudan a combatir el nerviosismo y estimulan el cuerpo a la vez que incitan a la restauración tras la competición.
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A lo largo del entrenamiento
Es particularmente contundente y perfecto para una preparación eficaz, estimulando los músculos mientras los relaja de forma profunda.
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Después de un entrenamiento
Es una terapia de relajación genial y de recuperación de la musculatura utilizada en el entreno. Ayuda, además, a prevenir posibles lesiones de sobrecarga.
Los masajes deportivos, por otro lado, se pueden hacer cuando ya tenemos una lesión, ya que nos ayudarán de forma muy significativa a recuperarnos más rápidamente de esta y así volver a los entrenos lo antes posible (muy importante cuando se hace deporte de alto nivel como para los deportistas regulares que no quieren perder constancia). También nos ayudarán a la óptima y perfecta recuperación de la lesión en cuestión. En muchos casos, también ayuda a relajar otra musculatura que sobrecargamos.
Cuando hay una sobrecarga de entrenamiento o una contractura, este tipo de terapia ayudará a los tendones, musculatura y ligamentos a recuperarse y descargarse de una forma muy satisfactoria y relajante.
En definitiva, es una de las mejores maneras y, por qué no decirlo, de las más sencillas de ayudar al músculo y a las estructuras cercanas (ligamentos, tendones, fascias, aponeurosis, etc) a recuperarse más rápidamente de los esfuerzos físicos, siendo capaz de eliminar las sobrecargas y las contracturas musculares.
Ejercen, además, un efecto directo y muy importante de:
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Drenaje circulatorio y linfático
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Aumento y facilitación del riego sanguíneo, muy a menudo disminuido y alterado por la tensión muscular.
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Disminución del tono muscular demasiado elevado
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Alargar médicamente la musculatura para que recupere la medida que tenía antes del esfuerzo físico.
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Prevención de lesiones tendinosas y musculares al eliminar las contracturas.
En general es una técnica inocua y muy efectiva, conocida y practicada desde hace miles de años, que nos permite conocer al paciente en profundidad y adaptarnos a sus características físicas y preferencias personales.
Sabiendo esto, vamos a añadir también que el masaje deportivo se debe efectuar cada cierto tiempo si estamos entrenando habitualmente: nos beneficiará en muchísimos aspectos.
Si bien no se tienen lesiones, recuerda que el masaje deportivo también nos ayuda a prevenirlas, a sostener nuestros músculos en estupendas condiciones, a estar listos para la actividad física y también a relajarnos antes y después de un entreno o competición. Sin duda, este tipo de terapia va a ser mucho más efectiva que tomarnos un té u otros remedios caseros que podemos encontrar por internet.
Si crees que necesitas un masaje deportivo, no dudes en contactar con nuestro centro y pedir hora con nuestro fisioterapeuta especializado en masajes deportivos.
Darrera actualització 07/12/2022